He decidido retomar este blog como mi blog profesional donde hacer difusión de mis conocimientos y habilidades como tal. En este post os haré una breve presentación sobre el grado de Estudios de Asia Oriental y qué capacidades he adquirido en este. ¿Por qué? La respuesta es simple. «¿Y eso qué es?» es la primera pregunta que me suelen hacer cuando hablo de mis estudios.
¿Estudios de área?
Los Estudios de Asia Oriental entran dentro de la disciplina de los llamados estudios de área. Éste es un ámbito de estudio interdisciplinar, es decir, en el que se tratan una amplia gama de disciplinas (valga la redundancia). Por ejemplo en el caso de mi grado hay asignaturas de historia, filosofía, literatura, lingüística, lengua (chino en mi caso), sociedad, cultura, arte, política, relaciones internacionales, economía, empresa y traducción. Evidentemente esto seria un campo de estudio demasiado amplio así que cada cual se va especializando en el ámbito que más le interesa. En mi caso me especialicé en sociedad, política y economía. Intereses que se añaden a mi eterna fascinación por las lenguas.
Todos estos conocimientos sirven para poder comprender una «área» concreta del mundo, siendo así capaces de ejercer como mediadores o intermediarios entre personas o entidades de este área y de nuestro lugar de origen, para asesorar a departamentos exportadores y de promoción, realizar análisis de países asiáticos, y para traducir del idioma del área a la lengua materna propia.
Esta disciplina se encuentra en un momento de redefinición. Por un lado hay una problemática sobre la división el mundo en áreas. No entraremos en este debate, pues no es lo que queremos aquí, simplemente deciros que ante la definición de un área hay que preguntarse quién y por qué la ha definido como tal. Es decir, ante la pregunta sobre qué países se incluyen en Asia Oriental podemos recibir múltiples respuestas. A esto, sólo puedo responder que mi campo de estudio, determinado como «Asia Oriental», se ha reducido al estudio sobre China y Japón, con la ocasional aparición de Corea. Aunque dado que mi lengua de trabajo es el chino, en mi caso he trabajado sobre todo en relación a China. Por otro lado, esta consideración del «espacio» puede perpetuar la asimetría presumida entre el espacio local y el espacio global.
Si miramos un poco a la historia de esta disciplina, se dice que los estudios de área surgieron de (y continúan reflejando) los proyectos imperiales de clasificación, ordenación y poder. Evidentemente esto ha sido fuente de debate, cristalizando en Orientalismo de Edward Said. De hecho, algunos han afirmado que los estudios de área son los herederos del orientalismo clásico.
A pesar de todo, la importancia de los estudios de área reside en aprender de otras culturas, aprender a través de las lenguas, y traducir los conocimientos adquiridos. Finalizaré con una cita que expresa perfectamente lo que quiero decir con esto:
[I have] become aware of many writers who insist that it is both impossible and illegitimate to speak for or even about others: but as a teacher of geography I believe I have a responsibility to enlarge the horizons of the classroom and seminar. I know too, that there are dangers in doing so—of being invasive, appropriative—and I do not pretend to have any answers to these anxieties. But the consequences of not doing so, of locking ourselves in our own worlds, seem to be far more troubling. (Gregory, 1994)
Referencias
Gregory, Derek. 1994. Geographical imaginations.
Sidaway, James D. 2013. «Geography, Globalization, and the Problematic of Area Studies.» Annals of the Association of American Geographers, 103(4), 984-1002.
Tsu, Jing. 2011. «New Area Studies and Languages on the Move.» PMLA: Publications of the Modern Language Association of America, 126(3), 693-700.