El conflicto entre China e India. El caso de Paquistán

Hace algún tiempo colgué un trabajo sobre el conflicto entre China y Bhutan, en el que tenía mucho peso el conflicto entre China e India. Aprovechando el trabajo final de la asignatura de História Moderna y Contemporánea, hice un trabajo más en detalle sobre el conflicto sino-indio y sus consecuencias a nivel regional, esto último a través del conflicto con Paquistán.

Introducción

El objetivo de este trabajo es analizar el conflicto de India y China y ver como repercute en el de India y Paquistán. Así que veremos las causas de ambos conflictos, qué situación hay actualmente, qué relaciones se establecen entre estos tres actores y cuáles son sus intereses respecto al conflicto en la actualidad.

India y la RPC son dos países muy poblados, con una economía en desarrollo y con grandes fuerzas militares. Des de la guerra que los asoló en 1962 ha habido enemistad entre ellos y el conflicto no se ha solucionado, llevando a una situación de tensión en la zona y que salpica las relaciones con otros países. Aunque parece que los últimos años ha habido cierta intención de empezar a colaborar y cooperar.

Mi teoría inicial es que en el conflicto entre India y Paquistán está relacionado con el que hay entre China e India y que crece la tensión por la colaboración de China con este último. Además, entre China e India hay una competencia por la influencia en la zona que queda representada en territorios de alrededor, como el mismo Paquistán.

Historia del conflicto

El conflicto entre India y China

En primer lugar expondré de los hechos históricos del conflicto entre India y China [Ver Fig. 1]. La República Popular de China (RPC) entró en conflicto con India por la disputa de unos territorios en sus zonas fronterizas en 1962. Estas zonas eran la región de Aksai Qin (en la zona del Cashmere) y de Arunachal Pradesh (situada en el noreste de Índia y con frontera con Bhutan, Myanmar y China). (Deepak, 2013: 110-134) [Ver Fig. 3 y Fig. 3]

El origen del conflicto se remonta al establecimiento de fronteras que se hizo entre India, entonces ocupada por los británicos, y Tíbet con el Tratado de Simla y el establecimiento la línea McMahon en 1914, que determinaba las fronteras de la zona de la Arunachal Pradesh. (Vertzberger , 1982: 608-609) Por otro lado, con la ocupación del Tíbet en 1950 por la recién formada República Popular China y la consecuente concesión de asilo político al Dalai Lama por parte de India en 1959 (Joshi, 2011: 560), creció la tensión. Aunque en ese momento Nehru tenía interés en la amistad con China, de forma que acabó reconociendo su control sobre Tíbet. De hecho, India había sido el segundo estado no comunista en reconocer la RPC, pero las tensiones crecieron con estos hechos. (Vertzberger, 1982: 614)

Uno de los problemas que originó el conflicto fue la diferente concepción de pensamiento legal. Por un lado, India afirmaba que había acuerdos ratificados por el gobierno de Tíbet (por ejemplo el tratado de Simla) y que China no había mostrado nunca desacuerdo con la línea que se había establecido. En sus reclamaciones, India también se basaba en la frontera geográfica natural o en que un cambio de régimen no justificaba la cancelación de los tratados anteriores. Por otro lado, China afirmaba que ciertos sectores de la Línea McMahon no habían sido definidos y que esto era suficiente para hacer un nuevo acuerdo y tampoco consideraba que su silencio al respecto hubiera sido una señal de consentimiento. Además, también debemos tener en consideración que si China hubiese reconocido como legítimos los acuerdos con el gobierno de Tíbet, y reconociendo por tanto su derecho a hacer tal cosa, habría dado legitimidad a la afirmación de que la toma de Tíbet había sido la conquista de un estado independiente. A esto se añade que para la RPC un asunto territorial era un asunto de estado vital, de forma que la ley internacional era tomada como una herramienta en función de sus objetivos. De hecho, en sus argumentos se ve que el tema legal no era algo prioritario. El hecho que cediera a establecer un comité conjunto para las negociaciones entre ambos países era sólo una táctica para mostrar una determinada imagen a Asia (incluida India) y el Tercer Mundo: la de una nación que prefiere negociar. . (Vertzberger, 1982: 608-610)

EN 1952 se estableció la Frienship Association with China . (Vertzberger, 1982: 616-617), que floreció a partir de 1954, cuando se estableció el acuerdo Panchsheel, una serie de acuerdos establecidos después de la invasión del Tíbet para establecer un marco para las relaciones sino-indias. La ruptura de este acuerdo con la guerra de 1962 causó grandes tensiones entre ambos que no empezaron a disminuir hasta el establecimiento de la Línea de Control Efectivo de 1993. (Randol, 2008)

Antes de que estallara la guerra, hubo más factores que propiciaron que la tensión derivara en un conflicto armado. Por un lado hay el hecho que el gobierno indio tolerara el espionaje de la CIA, aunque no permitiera el establecimiento de un gobierno en el exilio por parte del Dalai Lama ni tampoco sacó el asunto a relucir en las Naciones Unidas, pero esto no era suficiente para convencer a China de sus buenas intenciones, ya que además había la sensación que las actividades subversivas en Tíbet ocurrían bajo conocimiento del gobierno indio. A parte de este “malentendido” había otro y es que Nehru consideraba que para China era de gran importancia el soporte de India para que entrara en las Naciones Unidas, pero a partir de la guerra de Corea, la RPC empezó a considerar que podía conseguir estatus y legitimación entrando en otros organismos, este cambio surgió a partir de 1958 y especialmente a partir de la condena de la ONU por los actos en Tibet en 1959 y el rechazo a su entrada en 1961. (Vertzberger, 1982: 621-622) Por otro lado también había en Beijing la convicción que India consideraba Tíbet como una colonia y que había instigación por parte de EUA (aunque ambas cosas resultaron erróneas). India veía que su reclamo sobre Aksai Chin, donde China había construido una carretera que unía Xinjiang y Tibet, era débil. A partir de entonces se empezaron a enviar tropas a la zona disputada. (Joshi, 2011: 560) Así que vemos que ya había una sospecha mutua.

Antes de que el conflicto estallara surgieron varias propuestas como la de que China aceptaría la Línea McMahon si a cambio India le cedía la zona de Aksai Chin, pero la fue rechazada por parte de India. El rechazo de India a negociar sin precondiciones, los intentos continuos de cruzar la Línea McMahon hacia el norte, la llegada inminente del invierno… todo ello hizo que el ataque fuera atractivo para China ya que las acciones de India requerían una respuesta y si no se tendrían que esperar hasta marzo de 1963, así que se planeó el ataque para octubre y noviembre (Vertzberger, 1982: 625), cuando Mao dio la orden a la People’s Liberation Army de atacar las tropas indias.(Joshi, 2011; 560)

La guerra acabó con un alto al fuego unilateral por parte de la RPC, un mes después de empezarla y el status quo se mantiene hasta hoy: India controlando la Arunachal Pradesh al este (reclamada por China) y China controlando Aksai Chin y partes de la zona de Kashmir que le fueron cedidas por Paquistán en 1963 (ambas reclamadas por India). Hasta 1976 no se restauraron los lazos diplomáticos entre India y China.[1]

En el contexto en que ocurre esta guerra es importante saber que Nehru y el gobierno de India no afirmó que su rivalidad con la RPC residía en el comunismo, pues esto hubiera significado posicionarse no sólo contra China, sino contra el comunismo en general. (Vertzberger, 1982: 618) E india era precisamente uno de los países que se unió al movimiento de países no alineados.

Ha habido propuestas para cambiar el estatus quo, por ejemplo en 1960 y 1980 China propuso intercambiar los territorios reclamados, pero se retiró la propuesta. A partir de 1985 China reafirmó sus reclamos sobre la Línea McMahon. El progreso en las negociaciones ha sido a intervalos irregulares des de entonces, aunque parece que ha sido más tratable que el conflicto entre India y Paquistán del que hablaremos en el siguiente apartado. (Joshi, 2011: 561) En 1988 fue la primera vez en 34 años que un primer ministro indio visitaba China y se acordó un grupo de trabajo conjunto para resolver el asunto. En 1996, el entonces presidente chino Jiang Zemin visitó India (fue la primera vez que un cabeza de estado chino hacía tal cosa), durante esta visita se hizo un acuerdo sobre el fomento de la confianza en el campo militar en relación a la zona fronteriza. [2]

El conflicto entre India y Paquistán

La división de Paquistán e India se hizo efectiva en 1947, después de la independencia de la fuerza colonial británica, y que causó grandes migraciones. Entre estos dos países se han producido hasta hoy cuatro guerras: en 1947, en 1965, en 1971 y en 1999.

Las causas del conflicto se pueden resumir en factores amplios: la naturaleza de la colonia británica y su política de retirada de la zona, los compromisos ideológicos de los líderes de India y Paquistán, y la fuerza de la relación irredentista y anti-irredentista entre los dos países. (Vaish, 2011: Part I) Ninguna de las guerras ha conseguido solucionar estos conflictos de raíz., así que esto ha creado gran ímpetu para solucionar el conflicto a través de negociaciones. (Vaish, 2011: Introduction)

Por otro lado hay el tema ideológico y religioso. Con la división de Paquistán e India, quedaba lo que representaba que era un estado musulmán y un estado secular (pero mayoritariamente hindú). Esto llevaba a un dilema con la región de Jammu y Kashmir, de mayoría musulmana pero con un líder hindú. Mientras uno consideraba que, como musulmanes, deberían pertenecer a su territorio que pretendía agrupar a todos los musulmanes de la zona liberándolos de la gobernanza hindú, el otro consideraba que como país secular debía demostrar que los musulmanes podían mantener su identidad. Así que ambos querían esta porción de territorio por el mismo motivo: la ideología de creación del estado. (Vaish, 2011: Part III)

Entre 1943 y 1956 hubo diversas negociaciones bilaterales. En septiembre de 1954 Paquistán se unió al SEATO (Southeast Asia Treaty Organization) y firmó el pacto de Bagdad en septiembre de 1955. Esto comportaba la unión con Estados Unidos y la llegada de la guerra fría a la zona, además la unión comportó una serie de ventajas respecto a India. Ese mismo año el entonces presidente paquistaní, Iskander Mirza intentó ganar soporte mediante el ataque al reciente apoyo soviético a la posición de India sobre Kashmir, mientras Nehru se posicionaba para que se produjera un trato de no guerra con Paquistán, que no se dio. (Vaish, 2011: Part II)

En enero de 1957 Paquistán llevó el asunto de Kashmir a la ONU, esperando recibir apoyo estadounidense, ya que se había dado cuenta que las relaciones bilaterales no daban resultados y que India favorecía el mantenimiento del status quo. Se propuso que se estableciera una fuerza de mantenimiento de la paz de la ONU temporal en la zona mientras se discutían posibles soluciones, a lo que Paquistán cedió, pero no India, que argumentó que no aceptaba tropas extranjeras en lo que consideraba su territorio. [3] En las negociaciones de 1953 y en 1962-63 el Banco Mundial, los EUA, Inglaterra y los soviéticos estaban activamente implicados, y por consideraciones de guerra fría India esperaba que dieran apoyo a Paquistán. Pero finalmente con el tratado de Simla de 1972 acordaron no internacionalizar el conflicto. (Vaish, 2011: Part III)

Entre 1960 y 1964 hubo otra ronda de negociaciones. El Indus Water Treaty se firmó en septiembre de 1960, y mientras pasaba el tiempo ambos fueron consolidando su posición en Kashmir. En 1963 Paquistán cedió aproximadamente unos 4000 km2 de territorio de Kashmir reclamado por India a China. (Vaish, 2011: Part II)

Des del conflicto con India de 1962, china se ha alineado con Paquistán y ha hecho fuertes inversiones económicas y estratégicas para mantener el enemigo común bajo presión estratégica. A partir de la década de 1990 China también ha intentado mejorar la relación con India a la vez que hacía esfuerzos en paralelo para mejorar las capacidades militares nucleares y convencionales de Paquistán frente a India. Fue la provision de un escudo nuclear y de misiles de China a Paquistán a finales de 80s y 90s lo que envalentonó Islamabad a hacer una guerra de poder en Kashmir sin temer las represalias Indias. Beijing ha tomado medidas diplomáticas y militares para preservar sus intereses geoestratégicos en Asia. (Malik, 2003)

Actualidad. Siglo XXI

Parece que se ha tomado una política de acercamiento entre ambos, pero sin llegar a liberar las tensiones o solucionar el conflicto. Por ejemplo en enero del 2000, un líder budista tibetano voló a India para unirse al Dalai Lama, cosa que provocó que China dijera que el acoger a este hombre sería una violación de los Cinco Principios de Coexistencia Pacífica.[4]

Se han producido diversas visitas entre India y la RPC. Por ejemplo en 2003 y 2005 hubo visitas del primer ministro indio (Atal Bihari Vajpayee) y chino (Wen Jiabao) respectivamente al otro país para reforzar las relaciones entre ambos países[5]. También el presidente Hu Jintao visitó India en 2006. China quería establecer cooperación económica que ya había ido creciendo des de entonces, pero para India era necesaria la resolución de la cuestión fronteriza para la mejora de las relaciones (Arif, 2013: 135). Des de 2005, cuando se estableció una iniciativa de diálogo estratégico (Anand, 2013), ha habido 13 rondas de negociaciones entre representantes especiales de China e India. En 2006 se llegó a un acuerdo que prácticamente establecía unas fronteras en base a un intercambio mutuo de reclamaciones. Ese mismo año se abrió el paso Nathu La, conectando Sikkim i Tíbet, quedando abierto al comercio después de 4 décadas de estar cerrado. (Joshi, 2011: 572) El 2006 un enviado chino a India insistió, una semana antes de la visita del presidente Hu Jintao, que la Arunachal Pradesh es territorio chino.  De forma que vemos como ha seguido habiendo encuentros y reuniones para la colaboración, a la vez que sigue habiendo tensiones por el tema fronterizo. Otros ejemplos de esto los encontramos en el hecho que China etiqueta Arunachal Pradesh como “South Tibet” (Joshi, 2011: 563), o en que se hayan publicado o censurado mapas distintos en la delimitación del territorio, tanto por parte de China[6] como por parte de India[7].

Posteriormente, en marzo de 2009, la disputa se acentuó cuando China intentó bloquear un préstamo de 2,9 millones de dólares del Asian Development Bank a India, préstamo que estaba destinado precisamente al desarrollo de la Arunachal Pradesh. Meses después India anunciaba su intención de reforzar su postura militar en la zona, enviando más tropas y acelerando las carreteras y pistas de aterrizaje. Por otro lado, la infraestructura militar de Tíbet ha mejorado drásticamente en la última década. En las últimas décadas también han proliferado las noticias de intrusiones chinas en la zona y también en otras zonas del Himalaya en que se disputan más fronteras. Aunque éstas no son muy fiables a causa del terreno y la imprecisión de la supuesta frontera. (Joshi, 2011: 561-562)

Por otro lado, ha aumentado la preocupación de China por la integridad territorial, ya que en 2008 y 2009 severos disturbios étnicos se produjeron en las regiones de Tíbet y Xinjiang.(Joshi, 2011: 563) Estas zonas están económicamente menos desarrolladas que las zonas costeras de la RPC, y este desequilibrio es, de hecho, uno de los grandes desafíos de la China actual. Se ha considerado que una mejora de las relaciones económicas con India u otros países de la zona podrían ser positivas para el desarrollo de estas zonas y favorecer su estabilidad (Shafiq, 2011). Además, Aksai chin ofrece una línea de comunicación entre Tíbet y Xinjiang, útil para su comunicación (Vaish, 2011: Part II).

India se ha acercado a EUA y otros países como Japón. (Joshi, 2011: 563) En 2005 hubo un pico de defensa y acuerdos nucleares con EUA (Joshi, 2011: 569), pero se debilitaron los lazos con la administración Obama. Esto no sólo impulsó India hacia Rusia, ambos compartiendo gran preocupación por la trayectoria de la estrategia de la OTAN en Afganistán, pero también reactivó la desconfianza respecto las intenciones de EUA. A pesar de esto, la venta extensiva de armas sigue lubricando la relación, e India seguramente  dio la bienvenida a la caída diplomática corta entre Estados Unidos y Taiwán en 2010. (Joshi, 2011: 575)

Por otro lado, India había crecido en Asia  y como ya hemos visto también lo hizo su relación con EUA. Pero después que estos empezaran a acercarse a Paquistán después de los ataques terroristas del 11 de setiembre de 2001, ya que a nivel geopolítico este era útil por sus conocimientos sobre los talibanes, Osama Bin LAden y Al Qaeda, y además las bases militares en Paquistán eran muy útiles para cualquier ataque en Paquistán. Esta intervención estadounidense en Paquistán en el conflicto que nos ocupa tiene importancia porque si EUA se aliaba con el enemigo de India, en Beijing se esperaba que esto causara un alejamiento entre India y EUA y que no tuviera su soporte. (Malik, 2003)

Actualmente, las relaciones entre India y China se están normalizando y ha aumentado la colaboración entre ellos. Por ejemplo lo podemos ver en su participación en organismos internacionales como el SAARC (South Asian Association for Regional Cooperation), del cual India es miembro y China ha devenido miembro observador (junto a Japón), mejorando la relación con los países de la zona.[8] Otro ejemplo es el recién fundado Asia Infrastructure Investment Bank del que ambos forman parte. También ha habido propuestas de reabrir la ruta de la seda[9], que en algunos casos se ha considerado como una forma positiva de terminar la disputa. (Randol, 2008) En 2009 el comercio entre ambos superaba los 50 millones de dólares y China se había convertido en el mayor socio comercial de India. Pero a pesar de todo sigue habiendo roces por el tema de los territorios disputados.[10]

De hecho, ha ganado popularidad el concepto Chindia por un libro de 2005 de Jairam Ramesh, aunque dicho concepto no queda definido de una forma clara y hay múltiples opiniones sobre ello. En general, Ramesh se interesa en potencialidades económicas entre los dos estados, más que en un idealista acercamiento de la cultura, filosofía, etc. de India y China, cosa que se espera en ciertos sectores defensores de China en India. (Randol, 2008) Así que esto también constituye un ejemplo de la creciente cooperación entre ambos.

Por otro lado, la cooperación económica con Paquistán por parte de China también está en alza. Un ejemplo muy reciente sobre esto lo encontramos el proyecto llamado Corredor económico de China y Paquistán, que unirá el puerto de Gwadar (del que hablaremos un poco más abajo) y Xinjiang.[11]

Análisis del conflicto. Actores e intereses

Después de acercarnos a los hechos históricos, creo que es conveniente hacer un análisis un poco más profundo del conflicto, viendo cómo interactúan los actores entre ellos [Ver Fig. 4] y qué motivos e intereses hay detrás de sus acciones en la actualidad. En primer lugar trataremos el tema entre la RPC e India y luego veremos qué relación hay con el conflicto indo-paquistaní ya que, de alguna forma, acaban relacionándose formando un triángulo.

Podemos empezar con el dilema de seguridad sino-indio que marca sus relaciones de forma clara. Hay una imposibilidad de medir con certeza las intenciones del otro, hay incerteza sobre el futuro, opacidad en la planificación militar, agravios históricos persistentes y prevalecen otras señales que acentúan el dilema, llevando a la disputa fronteriza a ser vista a través de un prisma de acentuada desconfianza. A pesar de esto, su enemistad es estratégica y no ideológica, así que es más tratable que no el conflicto entre India y Paquistán. (Joshi, 2011: 569)

A esto le podemos añadir que Pequín se ha movido diplomáticamente para consolidar su influencia en la periferia de India, y el corazón de este acercamiento se sitúa en el eje sino-paquistaní. Para China, Paquistán es modo de disuadir a India a bajo coste, mientras que, para Paquistán, China es una valiosa garantía de seguridad contra India,  su gran fuente de armas y ayuda en el proceso de nuclearización. Países que tradicionalmente se han considerado que pertenecían a la esfera de influencia india, como Nepal, Bangladesh i Bután, también han profundizado sus lazos con China de forma significante. En ellos India ha tenido influencia en la política doméstica i ha demostrado hostilidad en la involucración de fuerzas extraterritoriales, excepto Bangladesh. En este país también podemos ver la creciente influencia de China, que se ha convertido en su fuerte de armas más grande, además Bangladesh es un punto estratégico para garantizar las rutas energéticas y a nivel marítimo. (Joshi, 2011:564-565) Otros ejemplos de zonas donde ejerce influencia son Burma o Paquistán. A partir de todo esto se establece una competición por la influencia regional. (Randol, 2008)

A partir de esto podemos ver cuáles son los intereses de todos los actores de los que acabamos de hablar. Ya hemos visto que hay un dilema de seguridad en la zona por el creciente poder de ambos países, de forma que los dos están interesados en protegerse del otro. De esta forma aparece una competición por la influencia de la zona, a partir de la cual se ha establecido una especie de juego de equilibrios de poder. Además del interés de ganar esta “competición”, para China también es importante en relación a de fomentar el desarrollo económico de regiones del oeste e interiores como hemos visto más arriba, ya el control sobre estas zonas en conflicto podría comportar rutas comerciales que potenciarían el dinamismo económico.

Por otro lado también nos encontramos con más tensión a nivel marítimo. China estableció el ya tan conocido “Collar de perlas”, que pone India en tensión ya que podría llegar a cortar sus rutas marítimas y estas constituyen su principal vía de exportación. Así que hay gran vulnerabilidad a nivel estratégico. Uno de los puertos que crean tensión está precisamente colocado en Gwadar, Paquistán. Pero también los podemos encontrar en otros lugares como Maldivas, Sri Lanka, Myanmar, Bangladesh, etc. A pesar de todo, el “Collar” se presenta como algo comercial y no de carácter militar, pues un 62% de las exportaciones de la RPC nacen en el mar y un 90% de su petróleo viaja a través del Índico, por el estrecho de Malaca, y proteger esto es crítico para el crecimiento chino. Además, hay intención de eliminar cualquier intervención de USA a través de los estrechos. (Joshi, 2011: 567)

Por otro lado, nos encontramos con el crecimiento de la armada india y en la gran preeminencia marítima y local que India sigue teniendo. En estudios elaborados en India, se ha sugerido que su armada que se podría convertir en la única armada asiática que sea viable, cosa que es una aspiración china, que además está apoyada por florecientes lazos con Japón, Australia, Singapur y EUA. Se dice que tanto la modernización a nivel naval como nuclear están dirigidas a Beijing. (Joshi, 2011: 566)

A pesar de la explosión de comercio y enlaces institucionales, las percepciones mutuas están marcadas más bien por ambivalencia y desconfianza, en contraste con la retórica cooperativista del gobierno. (Joshi, 2011: 568) El comercio sino-indio crece rápido, aunque desequilibrado. Ambos gobiernos se mantienen pragmáticos y centrados en el desarrollo. (Joshi, 2011: 576) Ha aumentado el comercio bilateral, convirtiéndose China en el tercer mercado exportador más grande para India, y su única gran fuente de importaciones. Una guerra también pondría en cuestión el “ascenso pacífico” de China y sus “cinco principios de coexistencia pacífica[12]”, de los que hace bandera en su política exterior. Además, también se han establecido lazos institucionales que no existían en 1962. (Joshi, 2011: 571)

La inseguridad de India viene determinada por diversos factores. Además de la presión de la creciente influencia de la RPC en la zona que ya hemos visto, hay la postura nuclear agresiva de Paquistán, pues este es su única competencia a nivel militar en el sur de Asia y es por el apoyo de EUA y China (Subramanian, 1988). También hay el asunto del terrorismo, la pérdida de fuerza de la entente con EUA con Obama, los ataques o infiltraciones del ejército chino en zonas disputadas, el anuncio de apertura de nuevos puertos, etc. Todo ello contribuye a acentuar el dilema de seguridad que confunde la retórica de cooperación de los oficiales públicos. (Joshi, 2011: 569)

Por otro lado se considera que China siente poca amenaza de India, cuyo sistema político es caótico y muchas veces disfuncional. Aunque actualmente parece que Beijing empieza a tener más atención sobre India a través de iniciativas diplomáticas y militares, y los temas económicos son los asuntos a que se da más importancia en la relación. (Randol, 2008)

También hay áreas de interés mutuo como la estabilidad en la zona, la moderación del poder de EUA, la libertad en los mares, el cambio climático… Asuntos que resultan puntos útiles para la cooperación, aunque la sospecha mutua evita que se hagan grandes pasos en esta dirección. (Joshi, 2011: 576)

A nivel nuclear, todos ellos poseen armas nucleares, Paquistán con una posición más bien agresiva como ya hemos comentado, mientras India percibe su capacidad nuclear como embriónica comparada con China. (Joshi, 2011: 572) Pero a la vez el asunto mantiene alerta a China, pues India se percibe como una potencia que se alza de forma simultánea a la RPC y además ambas tienen interés en representar y liderar los países en desarrollo.

En lo que al papel de EUA se refiere, a parte de las colaboraciones esporádicas, se dice que teme que China e India cooperen y desafíen su hegemonía (esto des de una perspectiva realista). Pero además hay una creencia bastante extendida de que EUA está utilizando India para contrapesar la emergencia de China. Además también se considera que el crecimiento de India y su gran población conforman un mercado potencial  y atractivo para EUA, aunque esto también lo es para China (Anand, 2013). A esto se le añade lo que des de China se considera un importante elemento para la colaboración entre India y EUA: la democracia. (Randol, 2008)

Conclusiones

Después de elaborar el trabajo, mi teoría inicial se ha visto, en parte, refutada. Pues el conflicto entre India y China no tiene un peso muy grande entre el que hay con Paquistán, sino que hace crecer tensiones en la actualidad del conflicto con India a causa de la colaboración con China. Ya que los motivos del conflicto indo-paquistaní son más profundos que no una simple cuestión estratégica por su relación con ideología y religión. De forma que Paquistán en este conflicto toma un papel de elemento de presión respecto a India, pues a la tensión ya existente entre estos dos se añade el ascenso de la colaboración china.

Por otro lado, sí que encontramos relación entre ellos en tanto que Paquistán deviene un punto de tensión entre China e India, representando la competencia que hay en la zona por la predominancia regional. Esta “competición”, tal como hemos ido viendo, está regida principalmente por motivos económicos y por el dilema de seguridad. Y vemos como un conflicto que empezó como una simple cuestión territorial ha arrastrado la percepción y desconfianza en las relaciones actuales. Además, el tema territorial ya no es el quid de la cuestión en este conflicto, sino la balanza estratégica en Asia.

Por último me gustaría mencionar que la literatura disponible des del punto de vista chino es más bien escasa comparada con la de India. Y además la literatura india suele tener cierto tinte victimicista. De hecho, en artículo de Randol (2008) se afirma que sólo podrá haber un diálogo entre ambos estados si se elimina la mentalidad de victima de la población india.

Por ahora presenciamos un crecimiento de la cooperación entre estos países, pero con una nota de desconfianza por la historia de conflicto y roces que se arrastran des de, aproximadamente, los años 50 y que resultan determinantes en sus acciones.

Bibliografía

  • Anand, V. (2013) “China, India face stability challenge”. Asia Times Online. 6 Setiembre. <http://www.atimes.com/atimes/China/CHIN-01-060913.html> [última consulta: 18/04/2015]
  • Arif, Sheikh Mohd. (2013) “A History of Sino-Indian Relations: From Conflict to Cooperation”. International Journal of Political Science and Development. 1(4), 129-137
  • “China looking to revive «Southern Silk Road» with South Asia”. (2013) India report. BBC Monitoring South Asia, 10 Juny
  • Joshi, S. (2011). China and India: Awkward Ascents. Orbis, 55(4), 558-576.
  • “La Xina invertirà 42.200 milions al Pakistan per millorar la seva connexió energètica i comercial”  (2015). Ara.cat. 20 abril. Web: <http://www.ara.cat/mon/Xina-invertira-Pakistan-energetica-comercial_0_1342665917.html> [última consulta: 18/04/2015]
  • “L’Índia Bloqueja la difusió d’Al-Jazira pels seus mapes del Caixmir” (2015). El Periódico. Nova Delhi. 22 Abril. Web. < http://www.elperiodico.cat/ca/noticias/internacional/lindia-bloqueja-difusio-dal-jazira-pels-seus-mapes-del-caixmir-4123905> [última consulta: 18/04/2015]
  • Malik, M. (2003). The china factor in the india-pakistan conflict. Parameters, 33(1), 35-50
  • “Now India, China in map row over Arunachal Pradesh, Aksai Chin” (2012). India Today. Nueva Delhi. 23 Noviembre. Web: <http://indiatoday.intoday.in/story/india-china-map-row-arunachal-pradesh/1/230544.html>  [última consulta: 18/04/2015]
  • Randol, S. (2008). How to approach the elephant: Chinese perceptions of India in the twenty-first century. Asian Affairs, an American Review, 34(4), 211-226
  • Shafiq, Nadeem. (2011). “India versus china: A review of the aksai chin border dispute”. Journal of Political Studies, 18(2): 207-223
  • “South Asian progress an achievable goal”. (2005). China Daily, 15 Novembre.  p. 4.
  • Subramanian, R. R. “South Asian Security: The China-Pakistan-Indian Triangle”, Strategic Analysis, October 1988
  • “Timeline: Key events in Sino-Indian relations” (2010). CNN International Edition. 15 Diciembre. Web: <http://edition.cnn.com/2010/WORLD/asiapcf/12/14/sino.india.timeline/>  [última consulta: 04/04/2015]
  • Vaish, V. (2011). Negotiating The India-Pakistan Conflict In Relation To Kashmir. International Journal on World Peace, 28(3), 53-80.
  • Vertzberger, Y. (1982). India’s Border Conflict with China: A Perceptual Analysis. Journal of Contemporary History, 17(4), 607-631.
  • Xiao, R. (2010). “The International Relations Theoretical Discourse in China: One World, Different Explanations”. Journal of Chinese Political Science, 15(1), 99-116

Notas

[1] “Timeline: Key events in Sino-Indian relations” (2010). CNN International Edition. 15 Diciembre. Web.

[2] “Timeline: Key events in Sino-Indian relations” (2010). CNN International Edition. 15 Diciembre. Web.

[3] “Timeline: Key events in Sino-Indian relations” (2010). CNN International Edition. 15 Diciembre. Web.

[4] “Timeline: Key events in Sino-Indian relations” (2010). CNN International Edition. 15 Diciembre. Web.

[5] Ibid.

[6] Por ejemplo: “Now India, China in map row over Arunachal Pradesh, Aksai Chin” (2012). India Today. Nueva Delhi. 23 Noviembre. Web.

[7]Por ejemplo: “L’Índia Bloqueja la difusió d’Al-Jazira pels seus mapes del Caixmir” (2015). El Periódico. Nova Delhi. 22 Abril. Web.

[8] “South Asian progress an achievable goal”. (2005). China Daily, 15 Novembre.  p. 4.

[9] “China looking to revive «Southern Silk Road» with South Asia”. (2013) India report. BBC Monitoring South Asia, 10 Juny

[10] “Timeline: Key events in Sino-Indian relations” (2010). CNN International Edition. 15 Diciembre. Web.

[11] “La Xina invertirà 42.200 milions al Pakistan per millorar la seva connexió energètica i comercial”  (2015). Ara.cat. 20 abril. Web.

[12] Son: respeto mutuo por la soberanía y la integridad territorial, no agresión mutua, no intervención mutua en los asuntos internos del otro, igualdad y beneficio mutuo, y coexistencia pacífica. Extraído de: Xiao, R. (2010). “The International Relations Theoretical Discourse in China: One World, Different Explanations”. Journal of Chinese Political Science, 15(1), 99-116